Crisis de los 50

No sé qué le pasa a mi padre, creo que es que sé acerca a los 50, porque otra explicación no le encuentro.
Ahora, a mis 18 años me he enterado que yo soy su ojo derecho, y lo más gracioso es que me he enterado por terceras personas.
La sensación que tengo es que está disgustado conmigo en el ámbito académico, sabe que un año lo perdí, porque tenía ansiedad, y me dice que lo comprende, pero me parece a mi algunas veces que no, porque hace comentarios que me hace pensar que no.
Este año que he repetido ha sido mejor, hombre, he pasado de 6 a 3 asignaturas suspensas, 2 de ellas de su especialidad, que no he trabajado con él durante el curso, porque yo se que nos llevamos como el perro y el gato cuando se pone a trabajar conmigo, porque me ha sucedido siempre, y este año no quería darle tantos disgustos, porque el pobre ya tenía suficiente con lo mío y mi ex.
La verdad tengo que decir que se porta bien conmigo, me deja salir y esas cosas, yo también tengo que decir que no abuso mucho en ese aspecto, y sé que si una semana no me lo merezco no salgo.
Como dicen, en casa del herrero, cuchara de palo. Llevamos un par de semanas, que nos peleamos, me enfado, y me voy a otro sitio, luego cuando se da cuenta de que estoy realmente enfadado, hablamos, y luego consigue llevarme al huerto, bueno, aunque este enfadado, veo el esfuerzo que ha hecho, y entonces me pongo de buenas y seguimos trabajando.
Creo que lo que le pasa es que se ha esforzado mucho durante su vida, ha trabajado mucho para tener lo que tiene y estar donde está, y le entristece que me vea mal, o que puedo terminar mal.
Yo con mi padre no tengo mucho trato, creo yo, de vez en cuando intento gastarle alguna broma, o contar algún chiste, luego me dice que tengo un humor raro, o catalán, y a otra cosa. Nunca he llegado a comprender eso.
Nos sucede también que somos muy cabezones los dos, y siempre queremos tener razón, y yo nunca lo noto, pero siempre quiero ganar yo la discusión, y la mayoría de las veces me peleo con él por eso.
He decidido callarme más las cosas, y morderme la lengua, para evitar discusiones, es un esfuerzo que hago, que creo que no ve, pero bueno, lo hago.
También tiene el cosas de tonto, porque dice que le duele "el cuerpo", y le digo que vaya al especialista, y que allí le ayuden a recuperarse, que los dolores no se van solos. A mí también me sucedió eso, y me puse en manos de especialistas, que aún no dejo de ir, para recuperarme, y no me quejo.
En fin, es como es, y es difícil cambiarle de un día para otro.
Te quiero cabezón.